El Presidente y la Primera Dama nos toman por pelotudos

El Presidente miente: el miércoles dijo que no había reuniones sociales y el viernes le echó la culpa a Fabiola. La Primera Dama nos pidió que nos quedáramos en casa mientras recibió 23 veces a su estilista de moda, 36 veces a su peluquero y celebró su cumpleaños cuando los argentinos no podíamos ni despedir a nuestros muertos.
